
Te aportamos precisión de cálculo
Es la disminución periódica del valor de un bien. La exactitud en su cálculo es fundamental, si no la incorporamos en su totalidad al precio vamos a descapitalizar nuestra empresa. De acuerdo con la NIC 16 la depreciación de maquinaria y equipos es “la distribución sistemática del importe depreciable de un activo a lo largo de su vida útil”. En contabilidad la amortización debe ser similar a la depreciación real para que el beneficio sea igualmente real y en la contabilidad analítica, este dato tiene que ser exacto.
La depreciación es el resultado de la obsolescencia y hay tres tipos fundamentales:
- Obsolescencia funcional:
La que se origina por el uso, es la más normal en un activo productivo. Se produce por desgaste. - Obsolescencia tecnológica:
La que se origina por la aparición de una tecnología que ahorra tiempo o materias primas en su trabajo, que ahorra costes en definitiva. - Obsolescencia temporal:
Es la caducidad, fecha a partir de la cual un bien ha perdido sus cualidades. La corrosión, el cansancio de los metales y otros factores de la vejez que no tienen que ver con el uso.
Proceso
En nuestros inventarios podemos incorporar un campo proporcionando la depreciación real de unas instalaciones unitariamente, o por familias, o por tipologías y adaptándonos al ERP de tu empresa.
Ventajas
En la determinación de la depreciación de maquinaria y equipos te podemos aportar un alto conocimiento de las depreciaciones reales porque nuestra vocación es industrial y conocemos los activos de casi cualquier proceso productivo. Hemos intervenido en cientos de inventarios valorados y conciliados con la contabilidad para empresas industriales multicentro y multipaís. Conocemos toda la taxonomía industrial, es nuestro oficio.